“La impunidad por la violación de los derechos humanos persiste en México con muy bajos índices de enjuiciamientos o rendición de cuentas en todas las modalidades del crimen”, señala un reporte global del Departamento de Estado de Estados Unidos presentado ayer.

El documento refiere casos de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas de personas, tortura y abusos en general, que implican a las fuerzas armadas y la policíaAñade que esta situación parece no hacer mucha diferencia con el clima de violencia que marcó al sexenio pasado.

El secretario de Estado, John Kerry, en referencia a una eventual reacción negativa de los gobiernos señalados en el informe, pidió a los líderes políticos mirar objetivamente el reporte. “Mi consejo, para cualquier líder que está molesto por estos hallazgos, es realmente examinarlos, observando las prácticas de su país y reconocer que la mejor forma de cambiar lo que piensa el mundo y la forma de evitar estos juicios es cambiar lo que está ocurriendo en sus propios países”, dijo Kerry.

El informe presentado ayer y elaborado por la Oficina para Derechos Humanos y Democracia del Departamento de Estado dedica 40 páginas a México, y en el mismo se exponen de modo destacado los casos Tlatlaya y Ayotzinapa, entre otros.

Los casos referidos son puestos como prueba de los abusos y la violación a los derechos humanos. “Hubo numerosos informes de que el gobierno, o sus agentes, perpetraron asesinatos arbitrarios o ilegales, a menudo con impunidad”, asienta el texto, en el que se resalta el alto grado de corrupción e impunidad que existe a nivel estatal y local.

Señala que  “los grupos delictivos organizados también fueron responsables de numerosos asesinatos, a menudo actuando con absoluta impunidad y en alianza con las fuerzas de una autoridad local o estatal corruptas, y funcionarios de seguridad”.

Tlatlaya y Ayotzinapa se exponen como dos casos en los que la violencia e impunidad desde las fuerzas armadas, y los abusos y la connivencia entre autoridades locales y estatales con el crimen organizado, demuestran que la lucha por los derechos humanos y el Estado de Derecho siguen dejando mucho que desear en nuestro país.

 

*Agencias