Miguel Ángel Gallegos Godoy es un hombre cuyo perfil ha pasado casi desapercibido para los medios de comunicación nacionales. Apodado “el Micheladas”, Gallegos Godoy aparece en reportes de inteligencia del gobierno federal como el hombre fuerte del tráfico de droga por territorio michoacano.

Desde mediados del años pasado está considerado como el heredero de las rutas que pertenecieron a Enrique “Kike” Plancarte, el capo muerto en los primeros meses del 2014 y quien junto Nazario Moreno, también fallecido por esas fechas en un enfrentamiento con fuerzas federales, encabezaron la organización conocida como Caballeros Templarios.

La detención de Servando Gómez Martínez, otro de los jefes de ésta organización, vino a fortalecer al grupo del “Micheladas”, un hombre discreto, hecho a la antigua usanza donde se privilegia el negocio por encima de la violencia y la presencia en los medios.

Los reportes a los que se tuvo acceso, señalan que Gallegos Godoy controla las rutas que pasan por Zicuirán, Ario de Rosales, la Huacana, y la sierra oriente michoacana, del municipio de Huetamo hacia el estado de Guerrero. Es decir, el corazón de la Tierra Caliente que une Michoacán con las montañas guerrerense y varios municipios del sur del Estado de México.

El reporte señala que el “Micheladas” se separó desde hace más de dos años de quien fuera su socio, el fallecido “Kike” Plancarte, quien dominó hasta meses antes de su muerte el mercado de mentanfetaminas en Texas. Junto a Gallegos Godoy se menciona a integrantes de la familia González Valencia, apodados “los Cuinis”, encabezados por José María, quien fue señalado como el cerebro financiero del denominado Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Existe una vena familiar que atraviesa el origen y se asienta en la jefatura del CJNG, según los reportes consultados.

José María González Valencia, “el Cuini”, cuya familia es oriunda de Aguililla, Michoacán, es cuñado de Nemesio Oceguera Cervantes, “el Mencho”, quien nació en el poblado de Naranjo de Chila, en éste municipio.

Oceguera vivió en Nueva Italia, en Uruapan y en Taretán, después radicó un tiempo en Tijuana. Hoy día se sabe que su familia radica en Zapopan, aunque él se mueve entre el área metropolitana de Guadalajara y poblados jaliscienses como El Grullo.

Sobre José María la prensa nacional ha dado cuenta desde el año pasado que como operador financiero de ésta organización del narco, ha realizado inversiones inmobiliarias en la industria hotelera en Guadalajara y la costa de Jalisco. Una nota del diario Reforma de marzo del año pasado, refería que también tenía cuentas bancarias en Europa.

La esposa de Oceguera Cervantes, hermana de los “Cuinis”, es también prima de una de las mujeres que en vida tuvo “Kike” Plancarte, socio hace más de una década del “Mencho”, cuando ambos trabajaban para la organización que encabezaba a finales de los años 90 los hermanos Valencia, líderes del hoy desaparecido cartel del Milenio.

Los hermanos González Valencia están identificados como los “pioneros” en introducir una “metodología” de la extorsión que utilizaban grupos paramilitares en Colombia. Se trataba de un sistema de “inteligencia” que consistía en revisar el registro de sanidad de la secretaría de agricultura, para checar quienes eran los agricultores con amplias extensiones de producción de aguacate, dónde estaban localizadas sus huertas, y cuánto reportaban en ventas por exportación. De la suma de todo ello se imponía una cuota, a quienes se negaban, les secuestraban o asesinaban familiares como herramienta de presión hasta que cedían.

La táctica fue copiada por los Templarios quienes hicieron de poblados como Tancítaro, el mayor productor de aguacate, su fuente de financiación “externa” al tráfico de drogas.

Después del colapso Autodefensa y que estos se destaparán en sus intereses de continuar con el tráfico de drogas y actividades criminales, tuvo lugar el reacomodo de jefes de plaza, la pelea constante entre los viagras, aliados con los troyanos contra el americano y sus H3 con el cártel de Jalisco a resultado en un baño sangriento en el cual al parecer el mercado del robo de combustible y los narcolaboratorios son la joya de la corona que ninguno quiere soltar.

Miguel ángel gallegos tiene fuerte el respaldo de nemesio oseguera y este se refleja en la impunidad con que ópera su grupo criminal Simón el americano y chanda comandados por el cenizo, posiblemente los templarios se dividieron en dos grupos pues tanto los viagras como los de H3 tienen influencia templaría en sus filas entre los cuales destacan jefes de plaza de nazario moreno y quike plancarte como yupo, matraca, seco, lico, 500, manny Carrillo, el chicano, el tena, el plátano, y el chelis.

 

 

 

Vía: Agencias/policiaestatalfuerzarural