Estado de México (Por Mariela) – “Requisitos imposibles de cumplir, pero con grotescas mordidas todo se arregla”, es la frase que comparte Javier Agustín Contreras Rosales con sus cercanos, amparado en la relación familiar que se dice tiene con la presidenta, hace de la frase el modus operandi de la actual administración que, mediante citatorios acerca a sus fauces a los empresarios, comerciantes y cualquier presa que ponga en la mira, para que al acudir a las citaciones y ya dentro de la oficina de Desarrollo Social, les caigan primero serias amenazas de clausura o el impedimento de iniciar labores para que sus víctimas aflojen, y ya aflojados, decirles de la otra forma que existe para parar la bronca, es decir, la forma light, esa que todos les conocemos; una lana y no vemos, no escuchamos y trabajen sin que nadie los moleste siempre y cuando aporten a la caja el dinero bajo el escritorio que sin tocar tesorería se va directo a las arcas de la corrupción encabezada por la madrina Gabriela Contreras Villegas.  

Queda claro que los morenistas integrantes de la actual administración en Teoloyucan llegaron a los puestos que ahora ocupan gracias al arrastre de Andrés Manuel López Obrador, arrastre que también se conoce como el “Efecto AMLO”, el cual sin duda los posicionó en la arena política a la que nunca hubieran llegado por su sola presencia, pues la mayoría de ellos eran hasta hace un tiempo, desde donnadies, hasta completos desconocidos.  

Desconocidos, inexpertos, donnadies y ladrones ¡claro que sí! Sin embargo, no quiere decir que por esa razón sean tan brutos, tampoco que carezcan de un mediano sentido de lógica, que, por cierto, y a falta de preparación para desempeñar sus cargos, se han apoyado justo en ese mermado sentido para permanecer por casi un año en las tenebrosas cuevas que conforman el interior del palacio municipal y hacen las veces de oficinas. 

Con los meses, esa primitiva lógica los llevó a entender que, por su inexperiencia en los menesteres de gobernar y transar era necesario rodearse de personas con práctica en el meollo para que les ayudaran a sacar la nueva chamba. Enterados de su pendejez, ni tardos ni perezosos se dieron a la tarea de contratar los perfiles de los que ellos carecen, por lo que empezaron a aparecer en escena y para quedarse, oscuros personajes Prianistas con antecedentes en Tequixquiac, Apaxco, Huehuetoca, Tlalnepantla y Tepotzotlán principalmente, quienes los han venido couchando en los menesteres del buen gobierno y los más, lamentablemente, en el buen robar.  

Los términos ratero y corrupto van de la mano, como de la mano vienen esos invitados arribistas que se han subido al barco de Teoloyucan provenientes desde sus lugares de origen, el caso de Contreras Rosales, personaje tlalneplantense que ya ocupa una flamante secretaría técnica dentro de las oficinas de la presidenta, después que en el inicio de la administración morenista ocupó en primer término la dirección de Desarrollo Social, para después de recibir tremendos golpes al ser exhibido como ratero en Redes Sociales, la propia “primera dama” del pueblo de Cristales, lo ha escondido y cambiado de adscripción para que despache, incluso, en vez de ella, justo en la oficina que se ubica en el segundo nivel de la esquina sur oriente del palacete municipal.

Luego entonces, Contreras Rosales ha probado ser un corrupto con mucha experiencia para hacer que los trabajos sucios parezcan limpios, y ha embelesado a sus cercanos y a la propia dueña por tres años de la silla grandota del pueblo por su asombrosa habilidad para conseguir dinero bajo la mesa que la edil, quien a manera de premio y con la intención de no despedirlo por las presiones sociales, lo ha ocultado de la vitrina pùblica en su alcoba municipal, desde donde continúa manejando la dirección de Desarrollo Social y prácticamente los hilos de todas las corruptelas que se llevan a cabo en las diferentes e inútiles dependencias en detrimento de quienes pensaron que vendría un cambio.