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Por: Clauz Gómez

Nunca se nos ocurre pensar que los problemas de los mexicanos pueden ser culpa de nosotros mismos, principalmente porque somos enemigos unos de otros. En casi todos los países del mundo, el ataque de un extranjero provoca la unión del pueblo por mas dividido que esté. Aquí nos sucede justamente lo contrario, es decir; si nos atacan nos dividen. Viéndolo fríamente, así es y así ha sido.

Hace más de cien años dijo el General Don Porfirio Díaz Mori: "La razón por la que le va mejor a Estados Unidos es que una vez que alguien gana la presidencia, el pueblo y los políticos se le unen para trabajar por la nación. En cambio en México, en cuanto alguien toma el poder, todos, enemigos y antiguos amigos, se ponen en su contra". Y sigue vigente.

Mexicanos al grito de guerra... ¡pero entre nosotros, la guerra Calderón la declaro!. Y este es el meollo del asunto; nos atacamos entre todos cuando deberíamos unirnos, no lo hacemos porque es una costumbre histórica heredada de generación en generación. Cuando México firmó su acta de independencia, el 27 de septiembre de 1821, en nuestro primer día como nación libre comenzaron los golpes. Unos querían un Imperio, otros…Monarquía.

De ellos, cada quien con un rey distinto. Otros más se decantaban por fundar una república, pero el problemas es que unos la Querían Federal y otro Centralista. Eso nos hizo matarnos todo el siglo XIX.

Cuando por fin los más importantes paladines de la independencia se pusieron de acuerdo, formaron un congreso que nombró emperador a Iturbide como Agustín I; al día siguiente, aquellos que pelearon a su lado ya peleaban en su contra.

Nuestro primer presidente, Guadalupe Victoria, encontró a su peor enemigo en su vicepresidente, lo mismo le sucedió a Vicente Guerrero con Anastasio Bustamante. Otros grandes antagonistas fueron Benito Juárez con Valentín Gómez Farías.

Y esa tan lamentada invasión gringa en la que perdimos medio territorio, la mayoría en el país sabe de esto, pero casi ninguno conoce los pormenores.


Todos han pasado a la historia como buenos y tienen sus nombres en oro en el Congreso; pero observa esto: El héroe Carranza mató al héroe Zapata, el héroe Obregón mató a los héroes Villa y Carranza y el héroe Plutarco Elías Calles mató al héroe Obregón. Por cierto, que el héroe Calles fue expulsado del país por el héroe Cárdenas. El proyecto de Guerrero era quitar a Victoria, el proyecto de Bustamante era quitar a Guerrero; el proyecto de Santa Anna era quitar al que se le pusiera en frente; el de Juárez fue quitar a Santa Anna y el de Díaz quitar a Juárez. Madero tuvo un proyecto: quitar a Díaz; Obregón quitar a Carranza y Calles quitar a Obregón.

Mientras los ejércitos invasores avanzaban por territorio nacional nuestros líderes se peleaban entre sí por el poder. Dos Marianos eran los protagonistas políticos de la época; el presidente Mariano Paredes, al mando del mejor ejército del que México había dispuesto en su historia, en vez de defender a la nación de la invasión lo usó para conservar el poder. El otro, Mariano Salas, estaba en la capital proclamando la monarquía. Los Yanquis entonces se apoderaron sin muchos problemas del palacio Nacional. Una mas; en la famosa Revolución Mexicana todos nuestros 'héroes' se mataron entre sí.

El proyecto de Fox era quitar al PRI... y lo logró. El proyecto de López Obrador fue quitar a Fox y después a Calderón, y no lo logró. Y en torno a esto último deberíamos reflexionar, sobre aquellas palabras citadas por don Porfirio Díaz:

"ya es hora de que dejemos de unirnos para atacar al presidente, ya es hora de que el proyecto de nación deje de ser quitar al que tiene el poder".
Aunque el gringo promedio es mediocre, son potencia mundial porque trabajan en equipo y porque a pesar de todo respetan a sus instituciones y a su presidente, mientras aquí Fernández Noroña en un incidente por ser un intruso, salió en la tele golpeando y golpeado por elementos de seguridad, quienes tenían la orden de no permitir el acceso a nadie que no fuera invitado, ya que custodiaban el Palacio Nacional donde sesionaba el Consejo Nacional de Seguridad Publica.
En este momento decisivo de nuestra historia vemos una vez más a Masiosare (un extraño ¿Enemigo?) enfrentando a todos contra todos. Tenemos quienes se dicen políticos, principalmente los radicales de las ¨Ultras¨ dispuestos a destruir y reventar nuestro maltrecho país antes de dejar que lo gobierne alguien que no sea su compinche.

Dicen que
¨el pueblo unido jamás será vencido¨...
deberíamos primero razonar ¿Cuándo será el día en que México esté unido? El día que lo logremos, sin duda derrotaremos a ese
extraño enemigo!.