Por: Javier Álvarez.

A finales de los 60s y principio de los 70s en nuestro país tuvimos un grave problema de salud con el denominado “gusano barrenador”. Esta plaga como otras, traspasó la frontera sur de nuestro país proveniente de nuestros vecinos de esa parte del continente, causando graves daños a los seres humanos y al ganado, principalmente a los habitantes de zonas rurales enclavadas en las sierras centro y sur. Cuestión que preocupó no solo a las entonces autoridades de la denominada Secretaria de Agricultura y Recursos Hidráulicos – SARH – si no también a los gringos quienes no querían que ese problema llegara a su país. Acertadamente apoyaron a las autoridades sanitarias de nuestro país, si mal no recuerdo fue a través de la SARH específicamente mediante la Dirección de Sanidad Vegetal.

De manera conjunta, analizaron que la mosca madre de las larvas era difícil de erradicar con insecticidas, además de lo costoso, no estaban de acuerdo en rociar tanto veneno en el ambiente. Por lo que en conjunto con las autoridades Mexicanas, llevaron a cabo una serie de estudios para analizar el comportamiento de dicho insecto y después de un tiempo se dieron cuenta que la mosca copula con el macho solo una vez y cuando su instinto le dice que está preñada, ya no permite que otro macho se aparee con ella. Fijándose en este comportamiento, los científicos de ese entonces encontraron la manera de producir in-vitro machos estériles, quienes al copular con la hembra provocarían que la misma ya no permitiera que otro macho la montara y consecuentemente los huevecillos nunca serian fértiles, logrando así diezmar considerablemente la población de este insecto.

Para tal efecto, a todo lo largo del país se habilitaron laboratorios productores de moscas macho estériles, mismas que al lograr su edad adulta (que por cierto su vida total alcanza solo algunas horas), eran dispersadas mediante avionetas principalmente en las extensas zonas del territorio nacional infectadas con esta plaga, pero de manera principal, se fijaron fuertes acciones a lo ancho del istmo de Tehuantepec, del golfo de México al océano Pacifico, por 100 kilómetros de largo aproximadamente, logrando de esta manera una gran barrera contenedora de la plaga, que si no erradico de tajo el problema, definitivamente si lo controló.

Lo anterior es solo un breve comentario de lo que recuerdo sucedió en aquel entonces, que al traerlo a mi memoria note la gran similitud que tiene ese proyecto estratégico, aterrizado y funcional con el “PLAN MÉRIDA” que a diferencia del primero este último no ha tenido éxito.

Válgame la comparación, pero la realidad es que entonces de manera inteligente o con labores de “inteligencia” – como dicen ahora los nuevos “polis” disque científicos - espiando el comportamiento de los animalitos, ambos países controlaron conjuntamente un grave problema causado por “insectos asesinos”, basándose únicamente en la información proveniente del análisis de su conducta (estas si fueron labores de inteligencia efectivas y sin comprar aparatos espías de más de 5 mil millones de pesos sin licitar) es como llegaron a conocer la manera de cotener la plaga.

Lo interesante del proyecto de erradicación de la mosca en los 60s y 70s, es que no mataban a los insectos, probablemente porque eran solo eso, INSECTOS! Ni siquiera les gusto la idea de los insecticidas por su costo y peligrosidad al medio ambiente, irónico verdad? Que ya no somos los mismos Mexicanos y gringos de esos tiempos?, habremos mutado?.

Algo así de simple, aplicando la fórmula del cómo se erradicó o controló la plaga, se podría implementar para controlar - sin buscar milagros - el problema de seguridad en México, y contener el paso, distribución de droga y armas en nuestro país.

Las circunstancias actuales casualmente son similares a las de aquel entonces, con la variante que el objetivo de la primera fue acabar con la reproducción de los insectos y en la actual somos los mexicanos el objetivo principal a eliminar.

Para dar inicio a la posible solución, se debería aprovechar mejor el dinero en especie aportado por los gringos tal y como en aquel entonces cuando se apoyó para la erradicación de la mosca causante de la plaga “del gusano barrenador”. Ua vez mas el Gobierno gringo a entregado millones de dólares en especie; instrumentos tecnológicos y armamento a México para erradicar al crimen organizado y sus actividades, todo esto mediante el tratado conocido como “Plan Mérida”. Aunando a este, tenemos el inmenso presupuesto Gubernamental Nacional asignado para tal efecto. luego entonces, Lo básico ya lo tenemos, falta que obliguen a dejar los escritorios a los que no han hecho el trabajo. Dichas acciones no se podrán llevar a cabo sin la buena voluntad del Gobierno en su conjunto.

Para resolver el problema de la seguridad en nuestro país, se debería de voltear a ver a los policías de experiencia sin traer extranjeros a asesorar lo que bien se puede hacer por Mexicanos que somos los que conocemos la delincuencia en nuestro país, aplicar eficazmente las acciones de inteligencia que llevan a los objetivos de forma casi inequívoca, obvio con policías  sentados en sillas para policías y dejar de importar modelos extranjeros o personajes que han estado involucrados en la búsqueda de solución en sus países de origen donde los problemas continúan, como lo es el caso de Colombia, principal exportador de Cocaína y huésped de las FARC y de donde viene un asesor a nivel Presidencia de la República.

La solución es mas cuestión de sentido común, aclaro, la profesionalización de los cuerpos policiacos en la que estoy de acuerdo, se debe dar de manera constante, apoyarlos con mejores sueldos y prestaciones, con infraestructura que les permita luchar en mejores condiciones que los delincuentes, actualizarlos en el manejo de tecnología toda vez que la delincuencia la está utilizando, obvio también en materia de derecho para conducirse con legalidad sin violentar las garantías constitucionales de las personas, permitir el acceso inmediato al policía en campo a bases de datos de todo tipo, dotarlos de las herramientas necesarias para desarrollar su actividad de manera científica como lo pide el actual sistema de justicia y de lo que carecen, sin estos apoyos y exigirles soluciones, es como pedirle peras al olmo o ilusamente pensar que trayendo extranjeros solucionaremos el problema.

Como muchos ciudadanos en nuestro país, no concibo que los integrantes actuales que ostentan altos rangos dentro de las fuerzas del orden, el ejército y armada que cuentan con los recursos humanos, tecnológicos y económicos emanados del presupuesto nacional y de apoyos internacionales, no puedan siquiera controlar una plaga como lo es el narcotráfico, o será que atrapar a los líderes sería autoatraparse?, porque creo que muchos delincuentes están en funciones oficiales, como ha quedado de manifiesto a lo largo de esta “guerra contra la delincuencia organizada”.

Indudablemente, considero que el origen del problema radica en la proliferación desmesurada de la compra venta y consumo de drogas en nuestro país. Si tomamos como referencia que un adicto consume mínimo un promedio de mil pesos diarios y debe de pagar el resto de sus gastos, comida, transporte y manutención de sus familia y que todo esto lo debe de cubrir con un salario no mayor a los doscientos pesos diarios en lo general, consecuentemente los adictos tienen un déficit de mínimo ochocientos pesos, a falta de ellos estos sujetos se ven en la necesidad de obtener el resto a como dé lugar utilizando las formas que todos conocemos.

Nuestras autoridades no ignoran esta realidad, pero lamentablemente poco o casi nada hacen al respecto, ellos conocen que las drogas y armas de todo tipo existen a lo largo y ancho de México, también saben quien ilegalmente las distribuye, las vende y quienes las consumen, además los encargados de combatir este mal, tienen mapeado el territorio nacional, conocen la manera de operar, la ubicación de narcos mayores, narquillos, burros y sus nombres, la de todas y cada una de las denominadas “tiendas”. ¿Qué pasa, porque no se ha parado la ola delincuencial? Si saben dónde, cómo y cuándo operan. Obvio que a alguien están beneficiando y no necesariamente a quien debieran, que somos la mayoría.

Porque si nuestros burócratas a quienes les pagamos por elaborar leyes, vigilar que estas se cumplan y si ellos saben lo anterior, como medida apremiante, no proponen y  acuerdan lo racional y lo simple! autorizar la venta, transportación, portación de armas y municiones, obviamente siguiendo los protocolos internacionales en la materia y ya! Al respecto nada que inventar, los modelos en países inclusive de primer mundo existen, y por favor que no argumenten que abría más muertos, los delincuentes ya la pensarían dos veces, no es lo mismo atacar a alguien desarmado que a alguien armado.

Porque no legislan y permiten la venta de droga siguiendo los  protocolos lógicos y así mermar las millonarias ganancias que obtiene el crimen organizado de este mercado ilícito motor de la delincuencia en nuestro país. El sistema lo podría implementar mediante los mecanismos similares a las drogas permitidas, como lo es el alcohol y tabaco. Drogas son drogas, o no? Al respecto, el Estado tendría ingresos extras y dejaría de estar lesionando la insipiente economía familiar del pueblo, con sus GASOLINAZOS, incrementos en el IVA, ISR, LUZ, AGUA, PEAJE EN CARRETERAS y pagar mejor a los buenos policías, entre otros.

Qué pasaría si se permite? de inicio; nada más de lo que ahora está sucediendo ilegalmente, es innegable que las dos cosas se utilizan, existen sin control y son una realidad!, obvio quienes quieren no lo ven.

Si después de legislar se diera la anuencia regulada para permitir las dos actividades principal combustible de las hostilidades en México, los cárteles y traficantes de armamento y drogas encargados del acarreo y venta terminarían, toda vez que sus ganancias desaparecerían.

Posterior a la etapa de la despenalización, seguramente seguirían las muertes violentas, pero no más de las que ya existen o están por concretarse! y en pocos meses seguramente vendría una de disminución en los delitos violentos provocados por un efecto de disuasión, basándonos en que el delincuente sabría que sus posibles víctimas ya no estarían en las circunstancias actuales en las que estamos, estaríamos a la par por lo menos en herramientas, ellos para atacar y nosotros con la posibilidad de defendernos, ya no seriamos presas atadas a la indefensión plena y a merced de ellos, coadyuvando de esta forma con los encargados de nuetra seguridad. Quienes consumen drogas las obtendrían legalmente mediante los protocolos adecuados, dejando a un lado al crimen organizado, y dejando utilidades economicas directas al gobierno.

Es frustrante saber, que a la fecha en nada nos han ayudado las ridículas medidas acordadas por los legisladores para disminuir el índice delincuencial, que se basan solamente en endurecer las penas y lo peor es que no existe una que nos pudiera llevar a buen puerto. Con las  iniciativas llevadas a la práctica solo han logrado llenar los pocos penales existentes que finalmente son escuelas de doctorado en delincuencia. Es un hecho que eso no funciona, está comprobado que al delincuente no le importa! La mayoría de quienes delinquen saben que en nuestro país, finalmente con influencias y dinero baila el perro y salen rápido de la cárcel, es más, la gran mayoría ni siquiera la tocan, aunado a todo esto se deben de sumar las deficiencias del sistema judicial en México que aprovechan los defensores de la delincuencia.

La regla general dice que; para resolver cualquier problema debe de existir la aceptación de la existencia del mismo. Una vez reconocido, se debe iniciar la aplicación de los métodos de solución, que generalmente no son fáciles debido al vicio que arrastran. Las cosas en México no se han dado debido a que deben pasar por la anuencia de las cámaras y seguir engorrosos trámites, generalmente las propuestas lógicas y viables no pasan y  se  quedan  archivadas   en  “los  sueños  de los  justos”. Pero como van a pasar si a nuestros representantes les vale madre, cómo no! Si ellos traen dinero a caudales, servidumbre y guaruras bien armados, ¿qué les preocupan los asaltantes y asesinos, la pobreza, la marginación, la falta de empleos bien remunerados? Si ellos viajan en vehículos blindados y si consumen drogas, que? nadie les hace un antidoping, además tienen fuero Constitucional que alcanza para resolver a su favor eso y más.

Normal 0 21 false false false ES-MX X-NONE X-NONE MicrosoftInternetExplorer4 cárteles